¿CUÁL ES TU ELEMENTO?-PSICOLOGOS DONOSTIA
¿Te has sentido insatisfecho /-a durante un período de tu vida, y a la vez no sabías qué te faltaba realmente?. He podido identificar esa insatisfacción en muchas de las personas que veo y me rodean; y en mí misma en algún momento. Esta sensación nos hace ir dando giros sobre uno mismo de forma que la sensación de pérdida y de confusion es aún mayor, sin encontrar el lugar donde queremos realmente estar.
Lo sigo observando a mi alrededor en la actualidad. Depende de cada persona y habría que evaluar cada caso concreto, y además descartar clínicamente depresión p.e u otros trastornos que lleven asociados esa insatisfacción.
Cuando esto ocurre, ha llegado el momento de pararse a reflexionar sobre al menos, dos cuestiones y pasar a la acción si es necesario. Aquí voy a comentar posibles causas de esa sensación de insatisfacción, fuera de la clínica. Para ello, por un lado, voy a hacer mención a un libro y luego continuaré comentando sobre otra variable que puede estar influyendo en esa insatisfacción.
Y pensando en esto, la insatisfacción no sólo viene en momentos de crisis o de dificultad. O sea, que alguien que aparentemente lo tiene todo puede sentir insatisfacción; ¿acaso alguien no ha oído a alguien con empleo quejarse continuamente? ¿o a alguien que vive en un buen lugar, tiene buen empleo, familiares...? O puede que incluso uno mismo lo haya hecho.
Es aquí donde detenernos puede ser interesante. Y es donde se introduce un tema que leí en el libro de "El Elemento", de Ken Robinson (educador y escritor británico).
Y comienzo con un ejemplo que se me ocurre de repente y que da una idea de lo que trata este autor.
Cuando estábamos en clase o con nuestros padre o madre, y teniamos que colorear un dibujo nos decían: “no te salgas de la raya” o “de la línea”. Está bien; ellos creían que en ese momento tu dibujo tenía que quedar perfecto, lo más parecido a la realidad posible. Igual, ya se lo has dicho a algún hijo o hija, o al del vecino; no pasa nada. Estamos reflexionando. También cuando te decian: “Hazme el dibujo de un hombre” (o de una niña, o un coche, un balón…), y tu garabateabas sobre el blanco papel, ellos te acababan haciendo el dibujo de eso que te habían pedido porque tu `design´ no se parecía lo más mínimo a lo que te habían pedido. Así, que me planteo si esto, en algún momento se lo dijeron a aquellos conocidos artistas abstractos como Miró. O a otras personas que en un momento quisieron perseguir sus sueños y le dijeron: “tú estás loco, el fútbol no te va a dar de comer” , o la canción, o ser actor, etc. Sin embargo, todos conocemos ejemplos de superación que en un momento decidieron seguir su intuición y en este momento están disfrutando de tener el trabajo que les gusta. Lo laboral es un ejemplo, lo común viene ahora: tu pasión, tu elemento ¿dónde se encuentra?
Pero no es necesario ser artista, futbolista o famoso….He conocido personas que están en su Elemento (luego explicaré el concepto más detenidamente), y sólo les conoces su familia, y los del barrio. No hace falta ser famoso para estar en Tu Elemento. Por ejemplo, la cajera o cajero que te da con mimo la bolsa y te sonríe pasando los artículos con esmero y cuidado, el cartero que tiene su propia forma de ordenar las cartas y hacer su recorrido, el panadero que no sólo te vende el pan sino que te explica con sumo interés cómo está hecho, el agricultor que disfruta observando su tierra labrada,…etc.
Y…¿qué es el Elemento? Según Ken Robinson, es el punto de encuentro entre las aptitudes y las inclinaciones personales. Es cuando estás realizando una actividad (algún deporte, bailar, escribir, coser, organizar, hacer algo de manera artesanal,…etc) y sientes que el tiempo transcurre de forma diferente y te sientes más lleno de vida y auténtico que en otros momentos.
Para que sea posible que llegues a estar en tu elemento se tienen que dar dos características: capacidad (es la facilidad para realizarla) y vocación (te apasiona). Y dos condiciones: actitud (disposición, si creemos o no en nosotros, el optimismo) y oportunidad (relacionarse con personas que tengan que ver con eso que te apasiona).
Te propongo un ejercicio aquí para que puedes acercárte a cuál es tu elemento.
Por tanto una de las cosas que pueden llevar a esa sensación de insatisfacción es que no estés en tu elemento, aprovechando las capacidades que tienes, la pasión y combinarlo con esa disposición al optimismo de poder hacerlo y crear la oportunidad para ello.
Otra de las razones por las que puede haber sensación de insatisfacción es estar viviendo de acuerdo a los valores de otros, o los que tú creiste que para tí eran válidos porque era lo que te rodeaba. Es decir, cada uno tenemos unos valores que son el motor que guía nuestras acciones, y nos impulsan a vivir de un modo concreto. Si ni siquiera sabes cuáles son (algo que suele ser habitual porque no nos enseñan de otro modo), muy probablemente te hayas dejado llevar por la vida y no estés siendo conherente con tus propios valores.
Por tanto, la insatisfacción, que entre otras causas pueden estar estas dos, y siendo uno de los males de este siglo, se puede decir que tiene cura.